Porque sabemos que el camino de la vida no está hecho de rosas,
porque sabemos que ninguna tormenta es eterna y tenemos la certeza de que cada uno tiene en el interior una fuerza inmensa capaz de anteponerse ante cualquier adversidad.
No es fácil sacar la cabeza del agua, pero el reloj dicta sus tiempos y ante eso sólo nos queda intentar mejorarnoss a nosotros mismos y aportar a los demás lo mejor que cada uno tiene dentro.
Damos por inaugurado el Otoño...
¡ Bienvenidos !